Gachas de pito

Plato típico de nuestra tierra, de nuestra gente, van a traernos recuerdos de otros tiempos. Porque, ¿Quién no se ha comido en las noches de invierno una buena sartén de gachas de pito?
Los tiempos han cambiado, han cambiado nuestras costumbres y quizás la tan traída «dieta» no aconseja esta clase de comidas altas en calorías y que después de mucho comerlas han que nuestro «body» pierda esa esbeltez de la que presumimos.
Bromas aparte, es cierto que esta comida por estas y otras razonas este perdiendo tradición, y tenemos que fomentarla como un plato típico de nuestra tierra y de nuestra tradición.

Ingredientes:
– Harina de pitos.
– Unos dientes de ajo.
– Un guindillón.
– Aceite de oliva.
– Agua y sal.

Preparación:
Se calienta el aceite. Se fríen los ajos y el guindillón y se apartan. A continuación con la sartén apartada del fuego se va echando la harina sin dejar de remover. El motivo de apartar la sartén del fuego mientras se hace esta operación es para que no se queme la harina.
Una vez que la harina este frita se le echa el agua sin dejar de moverla y mientras le vamos dando vueltas y le añadimos el guindillón machacado que freímos al principio para darle color a las gachas. Cuando vaya quedando más o menos espesas (esto depende de nuestro gusto), les añadimos los ajos fritos. Unas vueltas más y listas para servir. La sal queda al gusto de cada cual.